jueves, 23 de julio de 2015

MENCIÓN ESPECIAL COMUNIDAD EDUPSIQUE

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Amigos, amigas, enemigos, enemigas, lectores, lectoras, gente, genta —la madre que parió a la Bibiana Aído y su dichosa paridad de los coj...—
¿Por donde iba?
Ah, sí. Ejem.
Hoy, 23 de julio de 2015, el Equipo de Moderadores de la Comunidad EDUPSIQUE: Narrativas Multiformes, encabezado por juantobe1, Alicia González, Marijose Luque Fernández y Eva Mercader —imaginaos el pedazo de cabeza que se gasta la comunidad, para que luego digan que dos cabezas piensan más que una. ¿Y qué me decís de cuatro? Haced la cuenta y ya me diréis. Vale. Ya lo dejo—.

Como os iba diciendo, la Comunidad EDUPSIQUE, ha tenido a bien distinguir a este humilde servidor...
De humilde nada.
¿Cómo que no? Oye, yo sigo siendo un tío humilde.
Tú sí. Pero yo no. Así que habla por ti, que yo lo haré por mí.
Ah, vale. ¿Me dejas continuar?
Adelante.
A lo que iba. La Comunidad EDUPSIQUE ha tenido a bien distinguirnos a mi blog y a mí con el anclado a su página de inicio durante el día de hoy. Las razones expuestas para tal disntinción son —y cito sus palabras textuales—: «Por la calidad del trabajo y creatividad expuesto en tu blog».
Realmente me llena de orgullo y satisfacción...
Eso. Tú plagia al rey, para que luego vayas presumiendo de humildad. No te jode...
Yo no plagio a nadie. Además, ¿de verdad tú te piensas que el rey se escribe sus propios discursos?
¿Ah no?
Pues no, listo. ¿Acaso no has visto las pelis de reyes? Esa gente tienen en las habitaciones de su palacio un montón de cuerdas que penden del techo y cuando necesitan algo tiran de una de las cuerdas dependiendo de lo que necesiten. Luego, una vez tirado de la cuerda, aparece un ujier o un secretario para satisfacer los deseos del monarca.
No jodas. ¿Me estás diciendo que el rey tiene una cuerda y que al tirar de ella aparece un tío con una máquina de escribir bajo el brazo dispuesto a escribirle los discursos?
Pues sí. Eso mismo he dicho.
La hostia. Pues qué buen invento ese. ¿Y por qué no instalas tú el mismo sistema aquí, en el blog? Así yo podría tirar de una cuerda cuando necesite que...
No sigas.
¿Qué?
No sigas, que te conozco. Mejor déjalo estar.
Eres un cortarrollos que no veas. Si la gente supiera lo triste que eres en realidad.
Oye, ¿me quieres dejar en paz? Estaba dando las gracias a la Comunidad EDUPSIQUE por la distinción de hoy.
Vale. Te dejo. Pero que sepas que lo del sistema de cuerdas me ha molado. Lo apunto.
Haz lo que quieras.

Perdón.
Pues eso. Que estoy muy agradecido a la Comunidad EDUPSIQUE por este bonito detalle que habéis tenido conmigo...
Y con tu blog.
Conmigo y con mi blog... —Dios, dame paciencia—.

Muchas gracias a todos y a todas. Recibid un fuerte abrazo de mi parte.
Y otro del mío. Y a las chicas un beso.
Serás capullo...
Tú calla. Sieso, que eres un sieso... Para vestir monjes te vas a quedar como sigas así. Solterón. Que eres un solterón.


sábado, 4 de julio de 2015

GRACIAS, JOSEP Mª



          Si de algo podemos presumir los escritores, sin mostrar rubor en ello, es de nuestros lectores. Y hoy me vais a permitir que presuma de un lector que, además, es amigo. Y blogger.
Su nombre es Josep Mª Panadés, y podéis encontrarle en los siguientes blogs que él administra:


Josep y yo nos conocimos hace unos pocos meses, y desde el principio se estableció entre nosotros una relación de aprecio mutuo y camaradería. Si yo necesitaba algo, él estaba ahí. Y viceversa. Y todo ello sin pedirnos nada a cambio, tal y como yo siempre he entendido la amistad sincera y desinteresada.

Cuando hace unos meses puse en conocimiento de todos vosotros mi intención de publicar mi primer libro con una selección de cuentos extraídos de este mismo blog, Josep fue de los primeros en decirme: «Pedro, desde ya puedes contar con una venta segura: la mía».
Y pasaron las semanas, los meses incluso, pues el proceso se fue alargando en el tiempo por las causas de sobras conocidas.
Y llegó el día. Al fin.
Ese día subí un post a mi blog anunciando el acontecimiento. Y ahí estaba Josep, con los dedos sobre el teclado de su ordenador dispuesto a cumplir todos los trámites necesarios para hacer el pedido. Y lo hizo.
En aquel mismo post lancé una proposición. Sugerí que, si os apetecía, aquellos de vosotros que compraseis mi libro y os hicieseis una foto con él yo me comprometía a subirla al blog a medida que me fuesen llegando.
Este lunes me llegó un correo a mi bandeja. Era de Josep Mª. En él me informaba que acababa de recibir su ejemplar en papel de mi libro, y me adjuntaba una foto.
Hoy me siento orgulloso de poder mostraros, con su beneplácito, el rostro de mi amigo Josep Mª posando feliz con su ejemplar de ABSURDAMENTE. Antología del absurdo Vol. I.


Como favor personal, le pedí a Josep Mª que me escribiese unas líneas contándome sus impresiones acerca del libro. Y ésto fue lo que me escribió:

«La lectura de Absurdamente. Antología del absurdo. Vol. 1 ha sido una experiencia de lo más agradable. Jugaba con ventaja, pues ya había tenido, y sigo teniendo, la ocasión de disfrutar del blog de Pedro Fabelo, y ya sabía lo que me iba a encontrar. Aun así, ha merecido la pena la pequeñísima inversión económica que me ha supuesto la adquisición de este libro, pues desde que empiezas a leerlo hasta que llegas a la última página no se le borra a uno la sonrisa.
Es una obra que resulta difícil dejar de leer. Acabas un relato y el cuerpo te pide seguir adelante, pues, al tratarse de relatos muy breves, piensas “uno más”, y sin darte cuenta te has leído el libro de cabo a rabo, que es lo que a mí me ha ocurrido.
Es un libro ameno, divertido, una perfecta lectura para cualquier persona que tenga un mínimo de sentido del humor. Su lectura te deja con un agradable sabor de boca y una sonrisa en los labios. Y es que Pedro sabe sacarle punta a cualquier cosa cotidiana y hacerla divertida.
Son historias que hay que leer también entre líneas, que es donde se dice lo que no se lee. Si el humor es sano, la lectura de este libro seguro que nos alarga la vida a los que hemos tenido ocasión de leerlo. Por lo menos, el tiempo se te pasa volando».

Juro por Groucho Marx que no he pagado a Josep Mª para que dijese esas cosas tan bonitas que dice a propósito del libro. Tampoco he añadido ni eliminado nada. Lo que habéis leído son sus palabras. Tal cual.

Muchas veces, a lo largo de estos casi veinte años que llevaba intentando sin éxito meter la cabeza en el mundo editorial, me preguntaba si realmente merecía la pena tanto esfuerzo, tanta dedicación y tantas horas de duro trabajo en la soledad de mi estudio. Hoy, después de leer algo como lo que Josep ha escrito, no tengo dudas al respecto: sí merece la pena luchar por hacer realidad tus sueños.

Gracias, Josep Mª.